¿Cuántas veces su hija o hijo le pidió un regalo que estaba fuera de sus posibilidades económicas?
Empezar a hablar de dinero con los hijos puede ser un tanto complicado, pero es sumamente necesario para encontrar el entendimiento entre lo que usted puede darle y lo que él o ella quiere. A continuación, le compartimos tres temas fundamentales que lo ayudarán en esta importante tarea.
1- ¿Cuál es la situación financiera de la familia?
Ojo, no se trata de contarle a su niño o niña cuánto gana al mes, porque probablemente no va a entender lo que significa la cifra, sobre todo si está muy pequeño. Lo ideal es trasmitirle cuáles son las posibilidades que tiene la familia, en qué se gasta el dinero y cuáles son las prioridades y por qué son esas.
Si está atravesando un momento difícil económicamente, sea transparente y cuéntele a su hijo o hija lo que sucede, pero sin entrar en detalles innecesarios que no pueda comprender, y que transmitan alguna inseguridad o frustración de parte de los padres, porque eso solo llevará al niño o a la niña a perder su confianza en el hogar.
2- ¿De dónde viene el dinero?
Hable con sus hijos sobre cuánto esfuerzo pone para ganarse el dinero, cuál es su trabajo y si lo cree conveniente, cuéntele que existen personas que no tienen acceso a un trabajo, para que así pueda valorar el esfuerzo que usted hace por llevar el dinero al hogar.
3-¿Cómo enseñarle a administrar su propio dinero?
En este punto es muy importante que usted tenga claro que debe evitar aquello de: “Yo le daré todo porque yo no lo tuve”, o querer sustituir su tiempo con dinero, o incluso, transmitirle a los niños que la felicidad está en comprar o gastar.
Es mejor ayudarlos a que sepan valorar lo que tienen, a que entiendan sobre lo que significa el esfuerzo, esto se puede lograr dándoles regalos que no sean inmediatos, sino que los ganen con sus buenas acciones.
Apóyelos para que comprendan los beneficios del ahorro, por ejemplo ayudándoles a ahorrar en una alcancía, o si van a la escuela, puede probar con darles una mesada semanal que ellos administren, y así entiendan que si se gastan todo en un día, no tendrán nada para el resto de la semana.
Por último pero igual de importante, escuche lo que él o ella tiene para decir, eso le ayudará a comprender los conceptos que su hijo tiene del dinero, y además es una oportunidad para responder las dudas que tenga, que seguramente serán varias, porque los niños generalmente son curiosos, por ello conteste con sinceridad y de la forma más aterrizada posible, no se complique.
Incluso, antes de hablar con su niño o niña de dinero, piense en las posibles preguntas que puede hacerle, dependiendo de las experiencias previas que tenga su hijo, así podrá enseñarle a tomar buenas decisiones financieras (adecuadas a su edad), a través del diálogo, no de la imposición.